(Aniversario de ordenación sacerdotal número 25 del padre Pablo Borda)

“Vayan por todo el mundo y prediquen el evangelio a todas las naciones” (Cf. Marcos 16, 9-15)

Este 26 de noviembre, en el marco de la celebración de la fiesta litúrgica del beato Santiago Alberione, fundador de la Familia Paulina, la Sociedad de San Pablo en Colombia, dio gracias a Dios por las ‘Abundantes riquezas de su gracia’ al permitir que se honre de modo especial, la memoria y obra del padre fundador. De igual forma, se celebraron los 25 años de vida sacerdotal del padre Pablo Borda en una Eucaristía solemne que tuvo lugar en el templo San Pablo a eso de las 6:00 p.m.

Esta celebración estuvo anticipada por la oración de la novena bíblica al Beato, en la que se hacía una hora de adoración frente al Santísimo, en sintonía con el memorial de la ‘Noche Santa’ en la que Santiago Alberione, siendo aún joven y delante del Señor eucarístico, recibe el mandato de “hacer algo por los hombres del nuevo siglo” –La noche que dividió el siglo pasado del corriente [el siglo XIX del siglo XX] –Esta noche, nace para la Iglesia la misión específica de anunciar a Cristo Camino seguro para llegar al Padre.

La celebración eucarística estuvo presidida por el padre Pablo Borda, quien celebró sus bodas de plata, 25 años de vida sacerdotal dedicados al servicio del anuncio evangélico. En la homilía pronunciada este día, el padre Pablo recordó la importancia de la vida y obra del beato Santiago Alberione, destacando de éste, la sensibilidad para interpretar los signos de los tiempos y el desafío heredado para hacer de nuestro carisma, un anuncio perenne del Reino de Dios que se comunica a los hombres en la persona de Jesús Maestro, Camino, Verdad y Vida.

Entre los asistentes se encontraban algunos miembros de la Familia Paulina: Hijas de San Pablo, Pías Discípulas del Divino Maestro, Hermanas de Jesús Buen Pastor (pastorcitas), Cooperadores Paulinos e integrantes de la Sociedad de San Pablo. Así mismo, se contó con la presencia de congregaciones religiosas y de familiares.

Oremos a Dios para que por intercesión del beato Santiago Alberione, suscite apóstoles y comunicadores, que aviven en el mundo la llama de Cristo, anunciándolo a todas las naciones como Camino, Verdad y Vida.

Oh Dios, que has suscitado en tu Iglesia al beato Santiago Alberione, presbítero, para que, con las diversas formas de comunicación, anunciara al mundo a tu Hijo, que es camino, verdad y vida; concédenos, te rogamos, que, siguiendo su ejemplo, contribuyamos asiduamente a la predicación del Evangelio a todos los hombres. Por nuestro Señor Jesucristo.

Amén